martes, 8 de septiembre de 2015

10 de Setiembre 1815 - 2015: ARTIGAS Y LA LUCHA POR LA TIERRA Y LA JUSTICIA, AYER Y HOY

-La tierra para el que la trabaje, la necesite y la cuide-

TIERRA, REVOLUCIÓN Y FEDERALISMO

...En consecuencia, los negros libres, los zambos de esta clase, los indios y los criollos pobres,
todos podrán ser agraciados con suertes de estancia, si con su trabajo y hombría de bien
propenden a su felicidad, y a la de la provincia...”
Cuartel General, 10 de Setiembre de 1815)

...Si los españoles hubieran penetrado en la República Argentina en el año 11,
acaso nuestro Bolívar habría sido Artigas...”
DOMINGO FAUSTINO SARMIENTO
Facundo”

Este 10 de Setiembre se cumplen 200 años de la formalización del Reglamento de Tierras que el movimiento artiguista revolucionario empezó a ejecutar políticamente en aquel intenso 1815, tanto en la Banda Oriental, como en otras regiones de la Liga Federal sudamericana, cuyos sectores populares combatientes no quisieron quedarse atrás en la distribución profunda de la riqueza que correspondía para darle un sentido real, justo y democrático al proceso revolucionario que se había iniciado entre 1810 y 1811.

La tierra era y es un factor clave en la lucha emancipatoria tanto en nuestra región Litoral, como en el continente, y en el mundo. Si la mayoría de los entrerrianos acompañaron a Bartolomé Zapata a principios de 1811 y a Artigas después (1811-1820) fue porque interpretaron estratégicamente que, después del 25 de mayo de 1810 y ante las debilidades y contradicciones de las autoridades de BsAs, era el momento decisivo para apropiarse de la tierra, que muchas veces trabajaban pero con mucha inseguridad, ya que podía venir cualquier burgués y/o burócrata amigo de los autoridades centrales a reclamar en Entre Ríos una propiedad que había “conquistado” en las oficinas del Estado en formación. Contra o más allá de las máscaras políticas de mayo y de la década 1810-1820, los pueblos pelearon por darle un contenido federal, popular, republicano y liberador al complejo proceso de lucha independentista.

Entre 1811 y 1815 se fue dando un duro y complejo proceso de definiciones políticas y sociales. Orientales y entrerrianos se fueron hermanando cada vez más en la lucha, junto a otros pueblos litoraleños, contra las traiciones, arbitrariedades y especulaciones de los gobiernos de BsAs y sus socios y titiriteros burgueses e imperialistas. En setiembre de 1815, un par de meses después del Congreso de los Pueblos Libres en Concepción del Uruguay, Artigas formaliza la política revolucionaria de distribución de tierras a favor de los sectores sociales populares comprometidos con la lucha y la expropiación a “malos europeos y peores americanos”.

EXPROPIACIÓN A MALOS POLÍTICOS Y EMPRESARIOS. EL REPARTO ARTIGUISTA DE TIERRAS, TAMBIÉN CONTRA EL MAL CABILDANTE AZCUENAGA: EL OTRO SECRETO DE LA DIAGONAL ROJA FEDERAL.




...La guerra civil salva a la revolución...”
EZEQUIEL MARTÍNEZ ESTRADA
Radiografía de la Pampa”

Uno de esos peores americanos que tanto cansaban a Artigas y a los artiguistas con sus especulaciones, con su doble juego, y que va a ser expropiado fue, nada más ni nada menos, Miguel de Azcuenaga, quién había sido vocal de la Primera Junta de Gobierno el 25 de mayo de 1810. Las máscaras y las caretas de mayo y de los años siguientes caían frente a la revolución de los pueblos que se jugaban a fondo por la liberación política y social.

La expropiación a los enemigos de la profundización del proceso revolucionario, había empezado un tiempo antes: el Reglamento vino a formalizar la necesidad estratégica y a potenciar la movilización popular libertaria. Seguimos aquí el brillante, profundo, sólido y muy recomendable trabajo de Eduardo Azcuy Ameghino, “Historia de Artigas y la Independencia Argentina” (BsAs, Ediciones Imago Mundi – CICCUS, 2015, especialmente pags. 279 – 390). Artigas estaba harto de hacer equilibrio entre las especulaciones de los hacendados -especialmente de quienes se decían sus aliados en Montevideo- que se decían patriotas y los sectores populares que necesitaban y demandaban profundización revolucionaria. El Reglamento expresa la formalización de la agudización de la lucha de clases en el proceso de lucha por los pueblos libres.

La distribución de las tierras se realizó, pero comenzó justo en el momento en que la Banda Oriental y la Liga Federal eran atacadas por los portugueses, con acuerdo de BsAs, que también atacó por su parte a los revolucionarios federales. Esa reacción y esa alianza de las clases dominantes contra una revolución que además de política quería y debía ser social, se consolidó con la traición del oriental Frutos Rivera vendido a los portugueses, y el Tratado-Traición del Pilar, firmado por Pancho Ramírez y Estanislao López con el infame Manuel de Sarratea en 1820.

REFORMA AGRARIA, ECONOMÍA DE GUERRA, PROBLEMAS Y DESAFÍOS

...Tajante como navaja
es la consigna artiguista
barrer al latifundista
la tierra es del que trabaja...”

El Reglamento artiguista de tierras tenía un sentido de reconstrucción económica, de justicia social revolucionaria y sobre todo, de economía de guerra. “Cueros por armas” era, en el fondo y como explica el Prof. Azcuy Ameghino, la necesidad estratégica del artiguismo. Por lo tanto, la política de tierras estaba orientada básicamente hacia la ganadería: los proyectos de desarrollo de la agricultura quedaban para más adelante, como respondió el propio Artigas a quienes impulsaban a su manera esa otra propuesta agraria.

Tal vez, como dice Azcuy Ameghino, el tamaño del espacio de tierra a repartir era muy grande y poco manejable para un desarrollo económico y social dinámico y equilibrado, y también se puede ver, en el articulado político del Reglamento, el equilibrio que el artiguismo hacía todavía con algunos hacendados que exigían el disciplinamiento social y la proletarización y explotación de los gauchos e individuos no propietarios. Pero estan claras dos cosas: que lo aspectos políticos democráticos y progresivos del Reglamento eran mucho más fuertes y decisivos que sus aspectos disciplinadores, y segundo, que el propio Artigas y su gente definieron al mismo como “provisorio”, es decir que la revolución iba a seguir siendo permanente, que, cuando mejoraran las cosas, se podía rediscutir, corregir y profundizar. Esa materia quedó pendiente.

No sólo en la Banda Oriental la multitud popular combatiente peleaba por la soberanía en serio, expropiación y la distribución, para consolidar en serio la libertad. Hay constancia de que también en Corrientes, por ejemplos, los sectores populares en lucha empezaron a exigir y a moverse para avanzar en esa reforma agraria en ciernes. Habría que estudiar cómo se dió este proceso de discusión y movilización en toda la Liga Federal. En BsAs, en el mismo año de 1815, con pocos días de diferencia con el reglamento artiguista, el gobierno ordenó el conchabo, el disciplinamiento y la proletarización forzada -el empleamiento- del gauchaje a favor de las clases propietarias, de los poderosos hacendados, de la burguesía terrateniente criolla en formación.

LOS MODOS DE PRODUCCIÓN Y LA LUCHA DE CLASES. MARTINIANO FIERRO. EL PARDO ENCARNACIÓN APURA A ARTIGAS




"El clamor general es: nosotros hemos defendido la patria y las haciendas de la campaña, hemos perdido cuánto teníamos, hemos expuesto nuestras vidas por la estabilidad y permanencia de las cosas. ¿Y es posible que desde el Padre, hasta el último negro, a todos nos hayan perseguido y procurado de todos modos nuestro exterminio, (y que) sigan ellos disfrutando de sus antiguas usuras y nosotros destrozando su mala conducta y su anti patriótica versación (...)".
... ¿es posible que "sean estos enemigos declarados del sistema los que ganan y nosotros los que perdemos?".


En Entre Ríos, se sabe que en ese SXIX, convivieron distintas modos de producción, de trabajo y de vida social: libertarios, matreros, comunitarios, colonos después, y pequeños propietarios convivían bien y/o mal con hacendados explotadores y esclavistas. Habría que estudiar más a fondo la lucha política de clases en todas las Provincias Unidas del Sur y en el propio seno de la Liga Federal, de la liga de los pueblos que querían ser libres. Si uno lee críticamente, por ejemplo, “Montaraz” de Martiniano Leguizamón, se encuentra con hacendados y matreros que seguían a Ramírez contra “las indiadas” de Artigas. En uno de los relatos de ese libro de Leguizamón, los personajes panchoramiristas huyen de un ataque “del tape Pohú” y su gente, y piensan refugiarse en algún barco portugués… Es necesaria y estimulante una lectura y una relectura crítica, a contrapelo, entre líneas y sintomática de la literatura y la cultura clásica entrerriana y litoraleña.

El pueblo profundo en lucha superó incluso a su General Artigas. Las revoluciones y los cambios políticos e históricos los hacen los pueblos conscientes, organizados, movilizados, decididos y activos, no los próceres de cartulina, afiche o gigantografía estafadora y desmovilizadora. El ejemplo más destacado aquí de la potencia de la lucha popular es el del Pardo Encarnación Benítez, ese moreno que era lugarteniente de Artigas y que emprendió el reparto de tierras entre la gente del pueblo, a pesar de que los cabildantes y hacendados todavía “patriotas” se quejaron formalmente de Encarnación ante el propio Artigas. El cabildo montevideano no dejaba avanzar con la reforma a Encarnación y éste decidió escribirle a Artigas, a su cuartel de Purificación, al norte de Paysandú, para pedirle y exigirle (!) definiciones. La caracterización social del proceso revolucionario y de las especulaciones conservadoras -y el doble standard- de los hacendados “patriotas” que hace Encarnación en esa carta política caliente (2 de enero de 1816) al Protector es extraordinariamente clara y profunda, y le reclama a Artigas, que aclare si es cierto que el propio General acuerda con los cabildante suspender el reparto de las tierras de los malos europeos Albines.

Artigas definió políticamente a favor de Encarnación. Le avisaba el Pardo a Artigas que, si no se entregaban las estancias de Albin al pueblo en lucha “se iba a abrir margen a una revolución peor que la primera” (Azcuy Ameghino, ob.cit, pp.387-389). El Pardo fue asesinado por los portugueses invasores el 26 de mayo de 1818, pero al igual que Andresito y tantas otras figuras populares de la Liga Federal, nos mostraron que el camino de la esperanza en acción y la transformación realmente liberadora está en la acción directa, consciente, organizada y federada del movimiento popular. Si la primera vez no alcanzó, la segunda debe contar con más organización, más planificación, más solidaridad confederada, más decisión y más acción.

COLONOS, COLONIZADOS y (NEO) COLONIALIDAD

...Aquí somos del mismo tiempo que el tiempo...”
JORGE LUIS BORGES

-¿Ha visto usted alguna vez un judío con chiripá, bota de potro y
facón al cinto?-le preguntó Amaro.
-No, jamás- contestó el porteño
-¿Y un morenito hijo del país, hablando idish?
-No, tampoco -dijo el porteño.
Entonces, permítame que le muestre Entre Ríos, mi provincia.”
AMARO VILLANUEVA,
Obras Completas, Vol.I, Eduner

...Comprendía Urquiza la urgencia de terminar con la
anarquía gaucha… Con el auxilio del gauchaje
desgauchaba la provincia...”
ALBERTO GERCHUNOFF
Entre Ríos Mi País”

La tierra era y es un problema político y social, urgente y estratégico, antes de Artigas, con Artigas y más allá del Protector, hasta el día de hoy. De la percepción del problema por parte de funcionarios coloniales como Rocamora -el reformista de la tierra que pensó el futuro de Entre Ríos como la provincia más linda de la América del Sur- o Azara a fines del Siglo XVIII -funcionario con el que trabajó el blandengue Artigas, y que después superó-, pasando por todas las luchas federales -revolucionarias primero, populistas después-, la colonización por los inmigrantes que llegaron y las luchas de los últimos tiempos -pequeños productores por un lado, ambientalistas por el otro-, la tierra ha sido una cuestión política y social medular, no siempre bien dimensionada y bien pensada tanto por gobernantes, como por militantes sociales y por el pueblo.

Para los charrúas, los guaraníes y todo el campo popular artiguista después, la tierra, que no se podía ni debía vender, era la vida, la dignidad y la soberanía del pueblo. Para el poder burgués criollo y extranjero, colonial ayer, neocolonial después y hoy, la tierra era y es una mercancía más que se transa sin moral en el mercado. Como supo ver claramente Ezequiel Martínez Estrada en su gran “Radiografía de la Pampa”, para la clase dominante criolla, la tierra sólo fue caución y garantía de negocios y de entrega al capital extranjero, fue garantía del Empréstito Baring, cuando Rivadavia inició la maldita deuda externa, y fue prenda de negocios asegurados para los capitales británicos con el desarrollo del ferrocarril extractivo imperial. Hoy, los capitales empresariales saqueadores y contaminadores empiezan a chocarse con las luchas y con el propio límite de la sustentabilidad de los negocios y nos proponen la nueva mentalidad “biosapiens”. La Madre Tierra merece respeto.

¿CAMPO O GOBIERNO, O CAMPO Y GOBIERNO EN EL CAPITALISMO EXTRACTIVISTA?





...Pero deben ser los soviets regionales y locales de diputados
campesinos -y en ningún modo la burocracia, los funcionarios-
quienes dispongan entera y exclusivamente de la tierra y fijen
las condiciones locales de su posesión y disfrute...”
V.I.LENIN
El Programa Agrario y el Programa Nacional”, en
Tesis de Abril”, 1917

El ideario de Artigas y del artiguismo no vuelve con la extranjerización actual de la tierra y de los principales medios de producción, ni con los monopolios, las corporaciones -ni con las malas ni con las “buenas”- ni con la concentración de la propiedad y la riqueza, ni con el extractivismo, el saqueo, la contaminación, ni con la guerra química a la madre tierra y al pueblo. Mientras existan estas cosas todos los homenajes nacionales y populares serán puro verso y complicidad funcional a la entrega y el saqueo. Es falso pensar simplistamente una dicotomía “campo vs gobierno”, cuando los grandes terratenientes, capitalistas y sojeros del campo, al igual que el gobierno del Estado tienen sellada hace tiempo una alianza de negocios con el capital concentrado transnacional. No hay “campo o gobierno” para los que juegan, desde el campo y desde el gobierno, con Monsanto, Daw, Syngenta, Cargill y/o los capitalistas chinos.

La dicotomía es pequeños productores y trabajadores rurales, junto al pueblo trabajador contra los monopolios y el saqueo -contra los grandes terratenientes, las multinacionales y los políticos cómplices-, por una economía social y sustentable, en el marco de una transición estructural liberadora abierta. Tenemos el extraordinario movimiento de las fábricas recuperadas y autogestionadas hoy por los trabajadores en expansión, y tenemos luchas nativas-originarias, campesinas y ambientales resistiendo: todavia falta unirle y federarle un gran movimiento por la recuperación de la tierra, en el doble sentido social y ambiental-alimentario-cultural de la expresión.



Prof. Mauricio Castaldo
Sec. De Formación de Agmer María Grande
Editor del Blog del Foro Artiguista Entrerriano
actividadentrerios.blogspot.com.ar
¡FUERA MONSANTO, FUERA CHEVRÓN,
FUERA CAPITAL IMPERIAL BIOCIDA

DE ARGENTINA Y DE NUESTRA AMÉRICA-ABYA YALA!