ZAPATILLAS, EXCLUSIÓN Y... MERCADO. SOBERANÍA Y... MERCADO:
La contradicción que tienen que resolver los trabajadores y el pueblo movilizados con conciencia política crítica propia:
Es tan importante que en el programa de Lanata se hable de las necesidades de los comedores escolares o de los gurises que dejaron la escuela porque no tienen zapatillas -algunos lo descubren ahora a eso-, como preocupante que en el mismo programa -como en otros espacios de medios- se plantee la usura extractiva de la deuda externa, los pagos locales o las alternativas realmente soberanas desde el punto de vista de los banqueros, los buitres y el mercado.
¡Si la plata de los argentinos va para los buitres, en una cuenta en Nueva York o en una cuenta en el Banco Central, los gurises van a seguir sin escuelas, sin zapatillas, sin comedores, sin justicia, sin dignidad!
*Los que hablan mediática e hipócritamente de soberanía no quieren hablar de necesidades. Los que hablan de necesidades -en los medios- no hablan de soberanía y democracia popular: hablan desde el punto de vista del mercado y de los empresarios, de una hipotética institucionalidad liberal que no existe ni existirá...
¿Alcanzas a ver la contradicción?
El pueblo trabajador tiene que construir pensamiento político propio: soberanía en serio, justicia económica y social en serio. En los setenta le decían liberación nacional y social.
NI COMO VENEZUELA, NI COMO CUBA, NO SEAMOS TORPES Y ESTÚPIDOS:
No podés comparar Arg con Venezuela: allá dan batalla contra los monopolios. No se habla de "precios cuidados", se habla de expropiaciones. Hay contradicciones y serias, pero en batalla política y popular, que se debe profundizar. Acá no hay batalla, hay discurso: "precios cuidados", por ejemplo, benefició a los grandes supermercados monopolistas.
No comparemos Argentina con Venezuela o Cuba: eso es muy ignorante, muy fascista, muy gorila, muy mala leche y muy funcional a la CIA (Central de Inteligencia Americana).
Eso no se hace. Tengamos cuidado por dónde nos quieren llevar, tanto los muy oficialistas como los supuestamente muy opositores... Tengamos cuidado... movilización propia... pensamiento propio... acción propia de los trabajadores y el pueblo.
¿HEGEMONÍAS CATASTRÓFICAS? ¿CÓMO ANALIZAR NUESTRA HISTORIA?:
¿Cómo denominar a procesos hegemónicos que, en las variantes del sistema, mantiene controlada a la población con supuestas alternativas -que no lo son-, dentro del mismo?
Rosismo o antirosismo, peronismo o antiperonismo: antinomias formales que en el fondo son dos caras del mismo sistema (¿contradicciones secundarias funcionales? ¿contradicciones formales pero no sustanciales? -relectura dialéctica de Bobbio-. La supuesta intensidad ideológica, discursiva y política de los supuestamente contrarios mantiene entretenida y controlada a la población dentro de ciertos límites ideológicos sistémicos.
¿Hegemonia histérica catastrófica? ¿Cómo denominar a las supuestas discusiones hegemónicas que nos influyen, nos controlan y nos llevan por sus estrechos callejones que no alcanzamos a ver?
De Rosas -o antes- hasta el populismo kirchnerista, y de Sarmiento a los antikirchneristas, la limitada matriz ideológica contradictoria y funcional parece darse continuidad.
El pueblo buscó caminos alternativos reales, resistió y resiste: el artiguismo, el jordanismo, los libertarios, la CGT Argentinos, la militancia revolucionaria potente, pero escindida y fragmentada, al igual que los movimientos clasistas, ambientalistas y populares de los últimos tiempos...
Una relectura crítica, activa, actualizada y movilizadora de Milciades Peña y de Jorge Abelardo Ramos, entre otros -Juan Carlos Torre, Iñigo Carrera, etc-, no vendría nada mal.
La coordinación y la construcción de una comunicación y acción contrahegemónica común llevará a la dinámica de la democracia común, la dinámica del pueblo trabajador liberado en batalla permanente por la democracia popular, sustancial, protagónica y popular, soberana y libertaria.
Mauricio Castaldo
Foro Artiguista Entrerriano
25/8/2014
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