La secretaría de derechos humanos de la filial Paraná de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), se sumó “al reclamo de la militancia popular consecuente y coherente”, y exigió “el desplazamiento del general Cesar Milani como jefe del Ejército”, confirmó a AIM el titular del área, Mauricio Castaldo. “El tiempismo del poder político abandona, una vez más, la ética y la coherencia”.
La secretaría de derechos humanos de la CTA Paraná exigió “el desplazamiento del general Cesar Milani como jefe del Ejército”.
En diálogo con esta Agencia, Castaldo opinó que “es inconcebible que, en un tema tan delicado, la presidenta de la república, Cristina Fernández, caiga en la grave contradicción de afirmar que sólo posterga electoralmente la designación de Milani ‘por no ser títere del linchamiento mediático de opositores que no están preocupados por las víctimas’, y no por la inaceptable historia represiva del militar, reconocida y difundida hasta por los propios medios del oficialismo. Además, al postergar y no desplazar a Milani, la falta de preocupación por las víctimas la expresan el propio gobierno nacional y la propia presidenta. El tiempismo del poder político abandona, una vez más, la ética y la coherencia”.
El dirigente gremial afirmó que “el debate político sobre la relación entre defensa nacional, democracia y soberanía popular es y debe ser amplio y profundo, y no puede reducirse a las malas improvisaciones de un gobierno y mucho menos en el marco de la continuidad estructural del saqueo, del extractivismo, de la dependencia, de la desigualdad y de la vigilancia, el intento de disciplinamiento y la vigilancia a los que luchan”.
En ese sentido, y en el marco de un año electoral, “es fundamental que los trabajadores y el pueblo se organicen, discutan y luchen por generar alternativas de cambios estructurales y además exijan, a todas las fuerzas políticas, el compromiso de eliminar las leyes ‘antiterroristas’, los proyectos X y toda política de disciplinamiento y represión a los que trabajan y luchan”.
Para Castaldo, “hay una situación alarmante de atropello a los derechos humanos, sociales y ambientales en Argentina. Así como se postergó -para no reconocer que se deberá suspender- el ascenso de Milani, los gobiernos nacional, provincial y municipales deberían suspender los acuerdos con Chevrón y los proyectos de destrucción con fractura hidráulica -fracking-, con Monsanto y el uso de agrotóxicos, con el capital termalista y la expoliación de la Toma Vieja en Paraná, como ejemplos de situaciones y luchas paradigmáticos”.
El profesor de Historia, integrante de la Junta de los Pueblos Libres, aseguró que “no habrá pueblos libres ni profundización de la democracia ubicando a referentes del Batallón 601 al frente de políticas de vigilancia y control social. No habrá pueblos libres con Chevrón, Monsanto, Cargill y los monopolios hegemónicos opresivos, que sólo no son corporaciones para los que no quieren ver lo profundo, lo real y lo estratégico en política”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario