domingo, 23 de agosto de 2009

El amor, los miedos, el país y la infancia olvidada según Darín

"No creo que los que hablan de endurecer la mano con los chicos que roban quieran más seguridad"

Una calurosa noche de noviembre del año pasado, tres hombres y una mujer asaltaron la residencia de Darín. Una veintena de periodistas de radio y televisión se apelotonaron en la puerta de la casa con sus móviles para escuchar el descargo violento, rabioso, indignado del actor.

No hubo descargo violento, rabioso e indignado. Con una musculosa blanca y una gorrita de béisbol, toqueteando nervioso con el índice de la mano izquierda el ojo del mismo lado -el gesto inconsciente que hace cuando todo conspira para que el equilibrio sea roto-, Darín salió a poner paños fríos. Se atrevió a pedir más oportunidades para jóvenes como los que acababan de reducir a su mujer y a su hija, y se habían escapado con su dinero.

La Nación-23/8-Leer

No hay comentarios: