La Digna Rabia (El Insurgente)

El Insurgente

prensa crítica vía internet

"Por las masas trabajadoras y campesinas, los grupos étnicos, y el Medio Ambiente"

EDICIÓN ESPECIAL

Año 4

Costa Rica, CENTROAMÉRICA

Quienes damos vida a este periódico, El Insurgente, nos unimos a la distancia al Primer Festival Mundial de la Digna Rabia, convocado por el heróico Ejército Zapatista de Liberación Nacional, de México

Editorial

a cargo del Coeditor Cacique Lempira

La Digna Rabia

Muchas las realidades, muy amplias las razones.

Tal vez usted, estimado lector o estimada lectora, se pregunté porqué este título para nuestro correo de ahora. De paso se contesta la pregunta de mucha gente acerca del porqué de nuestro trabajo, de nuestro tono, o de nuestras ideas. Las razones son múltiples, y arraigadas en amplias zonas de la maltratada geografía mundial. Las condiciones de existencia de la inmensa mayoría de la humanidad son sencillamente humillantes. Desde las hambrunas africanas, cuyos culpables siguen impunes, para ir luego a las maquilas chinas y paquistaníes, donde niños trabajan todo el día por sueldos miserables, pasando por cosas como la brutalidad policiaca perpetrada en Atenco (México) contra campesinos y trabajadores (as) de la localidad, o el reciente asesinato a sangre fría perpetrado por la policía griega en contra de un joven desarmado, o bien, la masacre de 17 campesinos indígenas bolivianos ultimados por escuadrones fascistas meses atrás; hasta llegar a la cotidianidad costarricense y centroamericana más inmediata; en la cuál se prefiere la extracción de oro por sobre el derecho a vivir en un medio ambiente sano y con aguas libres de cianuro (como se quiere hacer en la Zona Norte ), y se ve como algo normal que dos políticos corruptos van a salir pronto libres, como si nada, a las calles, a seguir robando a las personas trabajadoras, eso por no hablar de la pudrición de la policía política costarricense ( la DIS ), la cuál utiliza los datos secretos de mucha gente, a los que tiene acceso (cosa ya de por si censurable y repudiable, pues es digna de dictaduras y no de supuestas democracias), para la lucrativa venta de información a bandas de estafadores bancarios profesionales (¿¿quién vigila a la policía??). Y ni que decir de la dichosa crisis que se avecina, la cuál debemos agradecer al capitalismo neoliberal y su total irracionalidad.

Los frutos podridos del sistema saltan a la vista a través de las múltiples geografías. La basura apesta a todo aquel que medio abra los ojos. Abundantes los hechos repudiables aquí y allá, inevitables la indignación y el hastío por tanta porquería y tanta injusticia. Pero aún así, muchos y muchas quieren tapar estas verdades. Disponen de amplísimos recursos para ello, pues el poder es su patrono verdadero. Irrumpen en el acallado de las conciencias gran cantidad de actores sociales, cada uno con intereses propios, pero compartiendo en común una misma visión, la de los de arriba. Salta a escena el consumismo, tan en boga estos días postreros decembrinos. Mientras pocos tiraran sus lujosas sobras a la basura (sus cenas de gala, sus electrodomésticos usables aún, sus costosísimas comidas intactas, etc), otros no tienen ni con qué desayunarse mañana. La bestial contradicción está no sólo presente, sino que disimulada, en el “Mall” Internacional Las Flores (en Heredia, Costa Rica) por un muro con una altura de 10 metros , mediante el cuál unos pueden seguir su frenesí de derroche, amansando la conciencia a punta de concreto, y los otros ven imposibilitada la observación de esa insultante y contradictoria realidad gracias a los cientos de ladrillos (y también de promesas de los políticos). Se hace presente la prensa de los poderosos, más preocupada en los andares de los llamados “faranduleros” que en la búsqueda de soluciones a la crisis, eso por no hablar de sus numerosas incitaciones a la represión abierta, a la militarización, y al populismo de derechas, eso por no referirnos al robo descarado que nos hicieron del referéndum sobre el TLC, pues hasta publicitaron noticias falsas y dieron voz a fraudulentos economistas.

Los políticos también forman parte de la mampara con la cuál todo queda en paz, en la paz del cementerio, como bien dice Tatiana Lobo. Cada cuatro años observamos la parafernalia bestial de millones y millones gastados en el ascenso de quienes con sus políticas hambrean a las gentes humildes, y con sus limosnas engañan (incluso a algunos de quienes reclaman); de esta forma las posibilidades de cambio se ven frustradas en nuestro país. Unos no van a luchar por una sociedad mejor, pues muy felices se hallan en su mundo de consumo y más consumo, otros se resignan o pelean por las miserables migajas que el poder da. Otros prefieren hacerle el juego a los políticos, ayudándolos para obtener beneficios en el sistema explotador (y de paso no ver la realidad); ya sea desde la oficialía del poder (aquí en Costa Rica representada por los llamados “partidos grandes”), o desde las áreas marginales del allá arriba (los supuestos partidos alternativos, o sea, la llamada “izquierda responsable”, que si bien no son hegemónicos aún, aceptan a los poderosos, sus reglas, sus tratos y pactos, sus injusticias y mentiras; imitan su verticalismo y acriticidad internas, y buscan las sobras y las llamadas “pequeñas conquistas”, haciendo gavillas reducidas de beneficiados con las prebendas del poder, y marginando a multitudes en su lucha por un mundo mejor).

Otros, muy mayoritarios pero muy callados también aún, se resignan a la perra vida que llevan, amparándose en religiones de escape que invitan a evadir la realidad, en las promesas de los mismos políticos, o bien, refugiándose en el mundo fantasioso de los medios de comunicación, con sus cantantes del sueño, sus bailes, sus espectáculos de pésima calidad, y demás opios y engaños.

Evadiendo todo ese mundo no sólo falso, sino que también sacrificial e inhumano, se encuentran quienes luchan por la dignidad, quienes sienten una Digna Rabia (así, con mayúscula, pues es un algo compartido por miles aquí y allá, en el pasado, el presente y el ahora). Los Comités Patrióticos fueron prueba clara de ello; a punta de papeles, diálogos y trabajo serio; y a pesar de los figurones, de los líderes autoproclamados, y de los políticos oportunistas de siempre; estuvieron a punto de hacer lo inimaginable, la derrota al sistema capitalista en su propio terreno, en sus propias fauces, que son las de la lucha electoral (electorera). Digna Rabia sintió todo el mundo cuando ese 7 de Octubre nos enteramos del fraude. Digna Rabia deberemos cultivar en el ejercicio del derecho a resistir-existir, ello cuando debamos luchar en contra de que quieran arrasar nuestras playas en nombre del progreso de unos pocos (como pasa en Guanacaste y Limón con los proyectos de marinas), cuando debamos enfrentarnos a la policía para evitar que encarcelen estudiantes universitarios por cosas como fotocopiar un libro de texto obligatorio. Digna Rabia es la respuesta a dar por los campesinos al momento de que una transnacional quiera encarcelarlos por usar semillas que según el poder pertenecen a unos cuantos millonarios, pero que según el sentido común y la justicia su utilización es un derecho de todos y un monopolio de absolutamente nadie. Se abren muchas trincheras, aquí y allá, en todos los puntos geográficos del país. Sólo con dignidad (sin pactos con los poderosos, sin buscar migajas), con tenacidad y corazón las personas podrán luchar por sus más elementales derechos estos años que se avecinan.

Más cotidianamente la Digna Rabia es opción seguida de vida por muchas personas. Es visible en aquellos estudiantes que no acatan disposiciones (tanto formales y escritas en el papel, como informales y practicadas con palabras y actitudes) injustas, lesivas, y desiguales; está en quienes que se niegan a tolerar la discriminación por ser migrantes nicaragüenses y reclaman su derecho a vivir en paz y sin provocaciones ni chistes alusivos a su nacionalidad; la Digna Rabia está presente en aquellas mujeres que hacen caso omiso al qué dirán y se toman su justo derecho a administrar y planificar su capacidad reproductiva según les parece mejor. La Digna Rabia está presente en quienes, hartos de tanta promesa, tanta corrupción, mentira y fraude, no votarán más en las elecciones costarricenses. La Digna Rabia es una realidad en cada indígena térraba que se opone a que el ICE le inunde sus tierras en el suroeste costarricense, las cuáles son su herencia ancestral y nadie debe anegar. La Digna Rabia está presente en cada intelectual y en cada músico comprometido con su contexto, en su lucha en contra del clasismo que emana del poder. La Digna Rabia es el sentimiento experimentado por el pequeño productor que, harto de tanta expoliación e injusticia, decide romper tratos con los poderosos y asociarse cooperativamente para producir con justicia y equidad. La Digna Rabia está presente en todos (as) aquellos (as) que no le creen sus mentiras a la prensa de arriba y buscan formas alternativas de enterarse de los hechos.

A nivel internacional, esta Dignidad, y esta Rabia se manifiestan en múltiples zonas. Desde los mapuches chilenos, que se niegan a que el crimen brutal de Álex Lemún Saavedra

ESTA ES LA BANDERA DE LOS INDÍGENAS MAPUCHE

quede impune, y que luchan por sus tierras, heredadas ancestralmente y arrebatadas por el poder de la forma más amañada e impía; pasando por las y los zapatistas mexicanos, que a pesar de la brutal represión militar y paramilitar, construyen diariamente un mundo donde caben muchos mundos a través de sus interesantes y valiosos proyectos ( la Otra Campaña , las Juntas del Buen Gobierno, etc); hasta llegar a las luchas que en los países del llamado “primer mundo” sostienen personas valientes, dispuestas a defender su dignidad a contrapelo de leyes, prisiones y jueces injustos, como Mumía Abú-Jamal, preso político en Estados Unidos. Aquí y allá, en todos los puntos de la geografía mundial, se alza un sonoro ¡YA BASTA!

Esa es la causa de la Digna Rabia. A nivel difusivo y periodístico esa es la causa de periódicos como El Insurgente, pero más aún de gentes más lúcidas y con un trabajo más exhaustivo y profundo que el nuestro, como lo son Indymedia, CEDOZ, el Colectivo Poder Autónomo (Argentina), el Gruppe YA BASTA, y demás organizaciones divulgativas que han asumido la tarea de, desde la trinchera informativa, luchar en contra del olvido, de la injusticia, y en pro de la memoria y la dignidad.

Por todos los motivos aquí esgrimidos y explicados, nos unimos, aunque sea a la distancia, al Primer Festival Mundial de la Digna Rabia , por la humanidad y contra el neoliberalismo. ¡Que viva el Ejército Zapatista de Liberación Nacional! ¡Que viva la Otra Campaña !

El Insurgente es un medio independiente y autogestionario. No se envían ni reciben archivos anexos.

!Otros mundos son posibles!

!Por la Humanidad y contra el neoliberalismo!

!VIVA EL EZLN!

!NO al TLC!