sábado, 24 de enero de 2009

Binner, crítico: "Argentina es uno de los países más desiguales"

EL GOBERNADOR DE SANTA FE SE DIFERENCIA DEL GOBIERNO

Clarín 24/1

La distribución, dijo, es el principal desafío. Venía de cuestionar a Guillermo Moreno.

EN OLIVOS. BINNER, JUNTO A SCIOLI, LA SEMANA PASADA. TOMA DISTANCIA.
Coincidiendo con sectores de la Iglesia, también con reiteradas críticas de referentes de la oposición, el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, opinó ayer que la redistribución del ingreso es "el mayor desafío" que tiene por delante el país. No sólo eso. Calificó a la Argentina como uno de las naciones más "desiguales" del planeta.

Un par de días después de expresar su disgusto con la visita a Santa Fe de un hombre clave del Gobierno, el secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno, y en el comienzo de un año electoral que se convertirá en un test para el kirchnerismo, el dirigente socialista entregó una mirada crítica sobre las profundas desigualdades que presenta el país.

Binner, sin embargo, evitó las referencias puntuales. En ningún momento, mientras supervisaba obras en la zona norte de Rosario, aludió de manera directa a la gestión del oficialismo. Prefirió, en cambio, señalar entre los responsables de la situación, por "acción o inacción", a políticos y ciudadanos, entre los que se incluyó.

Al ser consultado por la problemática que deben afrontar aquellos que tienen la tarea de gobernar, el mandatario aseguró que "la redistribución de los ingresos es el mayor desafío para la Argentina, porque hoy es uno de los países más desiguales del planeta".

Señalado desde distintos sectores como uno de los dirigentes con posibilidades de luchar por la presidencia en 2011, Binner explicó que para dar un paso "gigantesco hacia la igualdad de oportunidades" es necesario garantizar a la población derechos "mínimos y fundamentales" como el acceso a la educación, vivienda y trabajo.

Su inquietud, puntualizó, se basa en datos "preocupantes" que entrega el asesor de la ONU, la Cepal y el BID, Bernardo Kliksberg. Esas estadísticas colocan además a Argentina dentro del territorio "más desigual, que es el de América Latina".

Binner asoma como una pieza clave en un distrito en el que el Gobierno jugará todas sus fichas respaldando, en octubre, la candidatura a senador de Carlos Reutemann. El socialismo le opondrá su presidente, Rubén Giustiniani.

El gobernador prefirió despegarse de esa puja. Advirtió que para atacar las desigualdades es necesario "construir a través del diálogo", por lo que llamó a "pensar en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones".

El dirigente socialista suele fluctuar entre las críticas moderadas al Gobierno y los gestos de apoyo. Hace una semana se sentó a la izquierda de Cristina Kirchner mientras se anunciaba un paquete de medidas para el campo.

Ayer, en medio de una persistente sequía que castiga a la región, volvió a jugar del lado de los chacareros. Comentó que "todas las recuperaciones que tuvo la Argentina en su historia han estado vinculadas con el campo" y alertó que "no sería buena consejera para apuntalar la salida de la crisis" que persista en el kirchnerismo "alguna actitud de resquemor" por la derrota de la resolución 125.

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