miércoles, 26 de noviembre de 2008

Venezuela: ¿Insistirá el gobierno con una reforma constitucional de corte socialista?

Elecciones en Venezuela

Entrevista a Luis Bilbao para el diario argentino Buenos Aires Económico

Por Emiliano Guido

¿Qué representa para el proceso bolivariano la elección del domingo?

Se trata de una victoria política y la afirmación estratégica del proyecto Bolivariano. Antes del 23 de noviembre la oposición tenía 6 gobernaciones (Zulia y Nueva Esparta, ganadas en las elecciones de 2005, más Carabobo, Guárico, Aragua y Sucre, cuyos gobernadores rompieron con Hugo Chávez a inicios de 2007 y se sumaron al sector más virulento de la derecha. Alineadas con el oficialismo había hasta el domingo 16 gobernaciones. Ahora la oposición cuenta con el control de 5 Estados y el gobierno central con 17. Pero esto debe ser todavía calificado: la oposición mantuvo sólo la mitad de los Estados que antes gobernaba y ganó dos (Miranda y Táchira). El Partido Socialista Unificado de Venezuela (Psuv), fundado por Chávez recién el 14 de marzo de este año, mantuvo 14 de las 16 gobernaciones que tenía y ganó tres en manos de la oposición: Guárico, Aragua y Sucre. La alcaldía mayor de Caracas quedó en manos de la oposición, lo cual le otorga un triunfo de escasa significación política efectiva, aunque de alto valor simbólico.

Hay algo más. El 2 de diciembre de 2007 el oficialismo había perdido un referendo para reformar la Constitución por apenas 10 mil votos de diferencia. La causa de esa primera derrota a lo largo de 13 elecciones, fue la elevada abstención (44%), en la que el grueso fueron los propios partidarios de Chávez. Esta vez, la abstención bajó al 35% (un récord de participación en elecciones para gobernadores y alcaldes). El Psuv obtuvo algo menos de 6 millones de votos (al momento de responder este cuestionario no hay todavía cifras totales), con lo cual recuperó más de un millón y medio de sufragios. La oposición, en cambio, perdió alrededor de 300 mil votos.

El trasfondo de lo ocurrido el domingo puede observarse también desde otro ángulo: en los Estados donde ganó, el Psuv sacó ventajas que hablan por sí mismas: en 8 Estados, más de 10 puntos de diferencia; en 4, entre 20 y 30 puntos; en 2, más de 30 puntos y en otros dos, más de 50 puntos. La oposición sólo ganó con 10 puntos de ventaja en Nueva Esparta (la isla Margarita), con alrededor de 6 puntos en 3 Estados y con menos de 2 en uno.

Estas cifras encuentran su verdadera significación, sin embargo, en un hecho trascendental de otro orden: la irrupción del Psuv como fuerza organizada, con definiciones ideológicas netas, un programa en aplicación a marcha forzada en todo el país, estrategia de nítidas definiciones y candidatos y direcciones elegidas por las bases en inédita experiencia de organización política.

¿La oposición cumplió con las expectativas de su apuesta política?

Basta contrastar los resultados con las declaraciones de sus dirigentes cuando lanzaron la campaña, en febrero último, al calor de la victoria obtenida en el referendo. Aspiraban a unificarse, centralizar un proyecto y alzarse con la mayoría de las gobernaciones. No alcanzaron ninguno de esos objetivos. Y en cuanto a la unidad opositora, es previsible que tras el 23 N, lejos de afirmarse, se debilite aún más. Objetivamente, la oposición no tiene nada que festejar.

¿Cómo queda la relación con partidos aliados que ahora presentan disensos como el PPT y el PCV?

Ése es otro costado de alta significación política: en los Estados donde el PPT y el PCV fueron con candidatos propios, rompiendo la unidad estratégica de las fuerzas revolucionarias, el Psuv ganó con holgura. Esas formaciones están muy disminuidas y es presumible que en el futuro inmediato perderán el grueso de la escasa fuerza con la que cuentan. La relación con el Psuv no es buena, porque la militancia vio la conducta de estos partidos como divisionista. No obstante, el Psuv programa ya la apertura de sus filas para incorporar a nuevos miembros del PCV y el PPT que tras la experiencia fallida resuelvan sumarse.

¿Perduran sectores e ideas golpistas en Venezuela?

Sí, por supuesto. Y los resultados reseñados probablemente acentuarán esa perspectiva en franjas minoritarias pero poderosas de la oposición.

¿Insistirá el gobierno con una reforma constitucional de corte socialista?

Es temprano para preverlo. En cambio, se puede asegurar que Chávez mantendrá la aceleración de la marcha en la transición al socialismo. De eso no hay duda alguna. Y ahora, luego de que el Presidente reconociera los resultados a la medianoche del domingo, será difícil insistir en la calificarlo como dictador. Ese es un rédito no menor en el balance electoral.


Enviado por Marcelo Martínez

No hay comentarios: