Estudios revelan que la mente comprime los períodos que nos dejan pocos recuerdos
NUEVA YORK.- La pregunta más alarmante la mañana de Año Nuevo -"¿Qué hice ayer a la noche?"- puede parecer benigna comparada con "¿Qué hice exactamente todo el año pasado?" o "¿Ya pasó una década?".
Sí. En algún lugar, alguien debe haber presionado el botón de avance rápido. El tiempo pasa, lento o rápido, pero en enero parece que voló y dejó conversaciones pendientes, relaciones no resueltas, malos hábitos sin modificar y objetivos sin alcanzar.
"Muchos piensan en objetivos y, si no los alcanzaron, entonces de pronto piensan que fue apenas ayer cuando se los fijaron", dijo Gal Zauberman, profesor asociado de marketing en la Wharton School of Business.
No hay comentarios:
Publicar un comentario