Miles de profesores paralizaron ayer varias ciudades de Chile en el comienzo de un paro indefinido, en un año cargado de protestas, que tuvo en junio una movilización de tres semanas de la que aún hoy unos 1,5 millones de estudiantes de colegios públicos intentaban recuperar las clases perdidas.
DEUDA HISTÓRICA. Por eso la movilización que se inició este viernes -con una adhesión de un 90%, según el gremio-, amenaza con perjudicar el fin del año escolar y la realización de una prueba para medir la calidad de la educación y otra para el ingreso a las universidades.
Los maestros, a la cabeza del comunista Jaime Gajardo, exigen el pago de la que ellos llaman deuda histórica y que se generó en 1981, cuando la dictadura de Augusto Pinochet ordenó que los colegios públicos dependieron de los municipios y no del Estado central.
El Diario de Paraná-24/10-Leer
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