En 1993, cuando se conoció el proyecto de privatización de las jubilaciones en pleno auge neoliberal, nuestra entidad participó junto con otros sectores de la campaña de un millón de firmas para que la ciudadanía decidiera. En contra de la idea de “libertad” que se suele asociar indebidamente con la palabra “mercado”, el régimen de AFJP fue de adopción compulsiva para los trabajadores.
Este régimen, debe recordarse, se llevó adelante en consonancia con el conjunto de privatizaciones que delinearon un Estado mínimo y funcional a un proyecto que, se ha demostrado, sólo favoreció la concentración y extranjerización económica en beneficio de unos pocos y en perjuicio de la mayoría de la población.
Los sectores que atacan la vuelta al sistema estatal son los mismos que aplaudieron, llevaron a cabo y se beneficiaron con las privatizaciones. Esos sectores anteponen la reacción de
La actual crisis internacional originada por el estallido financiero en los Estados Unidos es un lamentable testimonio de que la globalización neoliberal no ha podido resolver sus propias contradicciones entre el libre juego de la rapacidad de los mercados y la necesidad de regulaciones fuertes por parte de los Estados para preservar el interés general. Hoy las mayores potencias están tomando medidas extremas, parciales y tardías en la última dirección.
En tal contexto nuestra entidad considera positiva la medida propuesta por el gobierno nacional de restituir un régimen previsional público y solidario, destinando a las AFJP un papel complementario para el ahorro privado.
En momentos en que se inicia la saludable discusión parlamentaria sobre el proyecto oficial, cuya “letra chica” está por estudiarse, APYME destaca la necesidad de que la medida contribuya efectivamente al objetivo primordial de preservar los haberes de los jubilados y de quienes aportan al sistema, para lo cual será necesario debatir mecanismos de control que aseguren la transparencia y la buena administración de los fondos. En el debate debe considerarse la continuidad laboral de los trabajadores de las AFJP.
Asimismo la medida será positiva si se orienta a fortalecer al Estado en el contexto de la crisis internacional y fomentar la producción y el empleo. La ley que resulte deberá terminar con aquellos fondos especulativos que nunca sirvieron para constituir un mercado de capitales para las Pymes, uno de los argumentos de cuando se crearon las AFJP. En tal sentido, parte de los recursos que se administren podrían destinarse a un fondo fiduciario de apoyo al desarrollo de las Pymes.
Nuestra entidad solicita ser convocada junto con demás actores sociales para participar en la discusión sobre el control de esos recursos.
Buenos Aires, 23 de octubre de 2008
Francisco dos Reis – Presidente
Enviado por Carlos Pastori
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