Un intenso silencio envolvió a las 8.15 de ayer la ciudad mártir de Hiroshima. A esa misma hora, hace 65 años, EEUU lanzó la primera bomba atómica, que acabó con la vida de casi la mitad de sus habitantes. Tres días después repetía su acción en Nagasaki. Han tenido que pasar tres décadas y media para que EEUU y un secretario general de la ONU participen en los actos de conmemoración de aquella masacre que puso fin a la Segunda Guerra Mundial.
Mirari ISASI
El tañir de la Campana de la Paz de Hiroshima a las 8.15 hora local (1.15 en Euskal Herria), la misma hora en la que el 6 de agosto de 1945 el bombardero B-29 estadounidense «Enola Gay» lanzó una bomba nuclear de cuatro toneladas, marcó el inicio del minuto de silencio con el que las personas reunidas en el Parque de la Paz de la ciudad homenajearon a los cientos de miles de víctimas de aquel ataque y del que tres días después EEUU repitió en Nagasaki.
Representantes de más de 70 países y unas 55.000 personas acudieron para asistir a la emotiva ceremonia en el Memorial de la Paz, celebrada bajo un cielo azul similar al que predominaba aquella mañana de 1945 sobre la ciudad, antes de que se transformara en un infierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario