El caso de la central sindical es quizá el más cristalino en cuanto a la imposibilidad de conducir un teórico proyecto de cambio desde esas organizaciones. Al inicio del actual proceso político, se argumentó que la disputa por la conducción del PJ y la CGT tenía como objetivo garantizar la gobernabilidad, ya que sin el manejo de esta estructura partidaria y la conducción de esa central, es imposible gobernar la Argentina. Lo cierto es que bajo esa premisa, lo que se desplegó luego fue un dispositivo de relegitimación de la dirigencia sindical cegeteista, fundada en el papel de la actual conducción de la central obrera, representada en Hugo Moyano y el MTA, en la lucha contra el neoliberalismo en los 90.
Prensa de Frente-25/10-Leer
No hay comentarios:
Publicar un comentario