El Consejo Nacional de Políticas Sociales dio a conocer hace unos días su intención de producir yogurt probiótico para los comedores escolares con el propósito de evitar enfermedades en niños, puesto que este producto posee capacidades de regeneración de la membrana intestinal y evita obstrucciones en el tracto respiratorio.
Ya unos 56.000 chicos tucumanos recibieron diariamente un vaso de yogur probiótico desarrollado por el Centro de Referencia para Lactobacilos (Cerela), instituto pionero en América latina en el estudio de bacterias lácticas, que depende del Conicet.
En Entre Ríos, se reproduciría la experiencia desde los laboratorios de la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la Universidad Nacional de Entre Ríos, que funciona en Concordia, pero con la participación de diferentes organismos del Estado como la Agencia de Ciencia, Tecnología e Innovación (Actier) y la Uader, entre otras.
En diálogo con EL DIARIO, el decano de la Facultad de Ciencias de la Alimentación, Hugo Cives, informó que en los próximos días viajará a Tucumán con la idea de interiorizarse sobre la experiencia tucumana que hoy reparte 115.000 raciones semanales de ese yogurt, entre 56.000 niños de 0 a 6 años. El yogurt, que contiene el fermento probiótico formulado y desarrollado por el Cerela-Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (Conicet) está constituido por bacterias lácticas que fueron seleccionadas por sus propiedades y por su capacidad para estimular el sistema inmunológico. Fue suministrado a niños tucumanos que asistían a centros comunitarios, durante seis meses y la experiencia demostró que en esos niños “disminuyó la frecuencia de cuadros infecciosos respiratorios y gastrointestinales, y mejoró el sistema natural de defensa del organismo de los niños”.
El Diario-4/6-Leer
Ya unos 56.000 chicos tucumanos recibieron diariamente un vaso de yogur probiótico desarrollado por el Centro de Referencia para Lactobacilos (Cerela), instituto pionero en América latina en el estudio de bacterias lácticas, que depende del Conicet.
En Entre Ríos, se reproduciría la experiencia desde los laboratorios de la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la Universidad Nacional de Entre Ríos, que funciona en Concordia, pero con la participación de diferentes organismos del Estado como la Agencia de Ciencia, Tecnología e Innovación (Actier) y la Uader, entre otras.
En diálogo con EL DIARIO, el decano de la Facultad de Ciencias de la Alimentación, Hugo Cives, informó que en los próximos días viajará a Tucumán con la idea de interiorizarse sobre la experiencia tucumana que hoy reparte 115.000 raciones semanales de ese yogurt, entre 56.000 niños de 0 a 6 años. El yogurt, que contiene el fermento probiótico formulado y desarrollado por el Cerela-Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (Conicet) está constituido por bacterias lácticas que fueron seleccionadas por sus propiedades y por su capacidad para estimular el sistema inmunológico. Fue suministrado a niños tucumanos que asistían a centros comunitarios, durante seis meses y la experiencia demostró que en esos niños “disminuyó la frecuencia de cuadros infecciosos respiratorios y gastrointestinales, y mejoró el sistema natural de defensa del organismo de los niños”.
El Diario-4/6-Leer
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