La de ayer fue una jornada de recrudecimiento de las medidas de fuerza adoptadas por los trabajadores autoconvocados de la salud, que exigen que el Gobierno los convoque como representantes de los empleados de la sanidad para discutir en paritarias un incremento de haberes.
La principal novedad se registró en el hospital Padilla. Médicos, asistentes, enfermeros y empleados profundizaron el denominado "paro informático", que impide la confección de registros respecto de las estadísticas de atención. Y resolvieron que desde hoy entrarán en huelga por tiempo indeterminado. "Sólo se atenderán guardias, servicios críticos y urgencias", explicó el delegado de los autoconvocados, Jorge Ramacciotti.
Ayer, nuevamente, el Centro de Salud fue la institución donde más fuerte se sintió la medida de fuerza de los autoconvocados. "Las cirugías programadas debieron suspenderse y sólo atienden algunos profesionales en los consultorios externos, aunque a reglamento", señaló el subdirector del Centro de Salud, Daniel Pero.
Tucumán-La Gaceta-22/4-Leer
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